«Vinicius es hoy el jugador más determinante del fútbol mundial». Carlo Ancelotti pronunció estas palabras minutos después de que el brasileño diese una exhibición en Anfield. Dos goles y un recital ampararon a un jugador que está en un momento de plenitud absoluto en el que marca la diferencia en casi cada partido. Vini es el líder del Real Madrid y esta circunstancia no es casualidad. El atacante cuida cada aspecto de su día a día para rendir al máximo nivel y, sobre todo, con una continuidad que asusta.
Vinicius tiene a más de 30 personas trabajando para él. Algunas de ellas, lo hacen exclusivamente para él. La preparación física fuera de Valdebebas, la recuperación, la alimentación y la psicología están en manos de profesionales que están a su servicio 24 horas.
Vinicius tiene un gimnasio en su domicilio con todo lo necesario para seguir trabajando tras cada entrenamiento con el Real Madrid. Casemiro, su hermano mayor, le enseñó desde el primer día que un futbolista de élite trabaja dentro y fuera de la Ciudad Deportiva, algo que el delantero asume a rajatabla. Al mismo tiempo, tiene en la figura de Thiago Lobo a su fisioterapeuta de confianza. Con él trabaja la rehabilitación y prevención de lesiones después de cada partido.
Por último, la alimentación la cuida al milímetro. Daniel Vera Valle es el cocinero encargado de que coma lo que necesita para rendir al máximo nivel. Dos veces a la semana le permite darse el gusto de comer arroz con frijoles, su plato favorito, pero en su día a día lo que más abunda son las carnes blancas, el pescado y el arroz.
Con este trabajo, Vinicus ha estado tan sólo 70 días lesionado a lo largo de su carrera. Nunca ha tenido una dolencia muscular y lo más grave que ha tenido que superar fue una rotura de ligamentos de la articulación tibioperonea de la pierna derecha que le tuvo 58 días en el dique seco. El Bernabéu todavía se estremece al recordar como abandonó entre lágrimas el terreno de juego en un partido de infausto recuerdo para los madridistas contra el Ajax. Luego, estuvo un partido convaleciente por un problema intestinal y dos por culpa del coronavirus.
«Es raro que no se lesione nunca, pero tiene una genética espectacular. Gracias a los padres. Y luego su profesionalidad, porque se cuida mucho, antes y después de partidos y entrenamientos. Es un chico muy focalizado en su trabajo», aseguró Ancelotti en la rueda de prensa previa al duelo contra el Atlético de Madrid.
